Traducción del texto de Genpo Roshi Speaking from the Voice of the Forever Unnameable. Esté dialogo fue más tarde desarrollado en el profundo, a la par que sencillo y entretenido, libro The Fool Who Thought He Was God.
Primero escribí una versión más temprana de
este blog mientras estaba un vuelo para visitar a mi hijo y a mi nuera justo
antes de Navidad. En aquella ocasión decidí hablar con la voz del Eternamente
Innombrable, uno de cuyos nombres e Dios, como si le estuviera entrevistando a
Él/Ella. Debido a que esta voz, como cualquier otra, reside dentro de cada uno
de nosotros, pensé que sería interesante y oportuno oír lo que Dios podría
decir en un mensaje de Navidad en
cierto modo graciosos pero serio. Después de recibir muchos comentarios y
seguir explorando esta voz, he añadido algunos pensamientos sobre lo que podría
decir sobre nosotros los humanos estos días.
P: Dios,
¿por qué estamos aquí? ¿Cuál es el significado y el propósito de esta vida?
Dios: Te he dado esta vida para vivirla.
Para vivirla plena y completamente. No para malgastarla, sino para darle
sentido. Si no le das sentido entonces no tiene ninguno. Por ello parece que no
eres capaz de encontrar el sentido y el propósito. Cuando la vives sólo para
satisfacer vuestros deseos y necesidades y siempre te pones a ti mismo primero
entonces vivís una vida muy superficial e improductiva.
Cuando os creé os cree completos, perfectos
y sanos. Di a la naturaleza de los seres humanos 2 caras, el Ser y el Humano.
El Humano esta lleno de deseos, necesidades, emociones, sentimientos,
sensaciones, heridas, dolores, y sufrimiento, así como también la habilidad de
amar y preocuparse por otros. Hice todo en pares de opuestos: masculino y
femenino, alto y bajo, bueno y malo, correcto e incorrecto, joven y viejo, los
sabios y los ignorantes, etc. Hice la vida y la muerte como los dos aspectos de
un todo. Imagínate un reloj: de 9 a 3 es como del nacimiento a la muerte, y de
3 a 9 como del nacimiento a la vida. Eres consciente del periodo entre las 9 y
las 3 pero no eres consciente de las 3 a las 9. Llamas vida a lo que ocurre
entre las 9 y las 3 porque eres conscientes de ello. Llamas a lo que ocurre
entre las 3 y las 9 muerte, pero es simplemente que no eres conscientes de este
periodo, el estado entre la muerte y el nacimiento. Del nacimiento viene la
vida, el sufrimiento y el placer y todas esas cosas — y la muerte, que es
simplemente una continuación de esa vida después de lo que llamáis muerte. Vida
y muerte son simplemente conceptos que habéis creado.
Si pudieras tomar distancia tanto como yo
puedo, entonces verías que hay sólo una totalidad. No obstante, no hice eso
fácil para vosotros. Requiere olvidarse mucho de ti mismo y tomar distancia
fuera de ti mismo. Estás tan identificados con vuestro yo ya apegados a quien
crees que eres que simplemente no puedes ver. Lo árboles te impiden ver el
bosque, estás tan cerca, necesitas distanciarte a ti mismo de ti mismo. Piensas
que tú eres tú, pero si eso es verdad entonces ¿quién te está realmente mirando y observando mientras
estás confundido ahora mismo?
Si miras al que está observando ahora mismo
no encuentras nadie ni ninguna cosa. ¿Quién es eso?. Mira, eso soy YO. Yo soy
tú pero tú no eres YO, a pesar de que te gustaría serlo y a veces incluso
actúas como si tú fueras YO. Piensas que hay un tú, y que tu tienes un ego, una
personalidad, una mente, un corazón , etcétera. Pero si tratas de encontrarte,
te elude, siempre parece que simplemente se escabulle. De alguna forma sabes
que no eres tu nombre o lo que haces, sino que no sabes quién eres. Ocultas
este no conocer fingiendo que conoces y comprendes, pero en verdad no lo sabes,
simplemente estás confundido. Llenas el tiempo con búsquedas y entretenimientos
triviales todo para no tener que afrontar que realmente no sabes.
P: Bien... ¿Qué debería hacer?
Dios: No hay nada que hacer. De hecho,
ese es tu problema.
P: ¿Qué quieres decir?
Dios: El problema es que piensas que
puedes resolverlo todo y finalmente comprenderLO. No puedes. Está más allá de
ti. Es incomprensible e incognoscible, y a tu ego no le gusta eso. Siempre
siente que debería ser capaz de conocer lo que es incognoscible y comprender lo
incomprensible. Esa es tu arrogancia como humano. A los asnos y a los perros no
les preocupa eso, solo al hombre le preocupa. Los perros son simplemente
perros, los asnos simplemente asnos, los árboles simplemente árboles. Sólo el
hombre piensa que puede resolverlo todo. La Verdad es que sólo yo, Dios, puedo.
El hombre no puede alcanzarLO porque ESO es eternamente inalcanzable. Como soy
la Verdad no hay nada que yo tenga que resolver.
¿Por qué no eres feliz simplemente siendo
tú? ¿Por qué quieres siempre ser diferente o mejor o más grande de lo que
eres?. Eres perfecto a mi imagen. Ocupa menos tiempo tratando de volverte
perfecto y más tiempo simplemente siendo. Tu ser ya es perfecto, nada falta o
sobra. Te hice intrínsecamente perfecto, completo y entero desde el principio.
No-hacer está más allá de hacer y de no hacer. Cuando actúes, simplemente se.
Cuando estés siendo, simplemente actúa. Simplemente hazlo desde ese lugar más
allá de hacer o ser.
P: Entonces, ¿Por qué sufro?
Dios: Sufres porque te ves a ti mismo como
separado de mi. De hecho te ves como
separado de todo. Piensas y actúas como si fueras el centro del universo y todo
girara en torno a ti. Una vez más eso es tu arrogancia. No estás separado de
todo, de hecho no estás separado de nada. Lo que haces afecta a todo el mundo y
todo lo demás y lo que todo el mundo y todo lo demás hace te afecta. Es como
una red gigante, todo está conectado y afecta a todo lo demás. Sufres porque
estás apegado a ti mismo y a todo lo que tu llamas “me”, “mi” y “mío” . Estás
apegado porque piensas que estás separado. Estás engañado y confundido.
P: ¡Pero dijiste que yo era perfecto y
completo!
Dios: ¡Lo
eres! Eres perfecto y completo, y sin embargo engañado y confundido. Si
simplemente aceptaras que estás engañado y confundido todo estaría bien y
correcto, pero no lo haces y por ello sufres. Es muy simple pero lo haces
complicado. Cuando admites que eres ignorante entonces eres sabio. Cuando
admites que estás confundido entonces tienes claridad. Los que son presa del
engaño piensan que están iluminados, los iluminados saben que están engañados.
Los ignorantes piensan que son sabios, los sabios saben que son ignorantes. Los
tontos piensan que son inteligentes, los inteligentes saben que no son más que
tontos. Los locos creen que están cuerdos, los cuerdos se dan cuenta de que
están locos. El pecador piensa que es un sabio, el santo sabe que es un
pecador. Son los tontos los que juzgan a todos los demás y piensan que ellos
son perfectos, los perfectos saben que no importa lo mucho que lo intenten,
nunca serán perfectos. Así son las cosas.
P: Entonces, ¿cómo sé que soy tonto o presa del
engaño?
Dios: Simplemente mírate a ti mismo.
Mírate, obsérvate, se honesto contigo mismo. Estás muy ocupado tratando de ser
honesto con otros, y sin embargo mientes y no te atienes a la verdad. Juzgas a
otros y eres rudo y egoísta, y sin embargo actúas como si fueras tan bueno y
honrado. Tu cara es una mascara, no enseñas tu verdadero yo a tros, y más
importante aún, ni siquiera a ti mismo. Admite y aprópiate del hecho de que eres
narcisista, de que mientes, robas, juzgas, condenas y odias. Eres un tonto
actuando como si fueras muy sabio y bueno.
Tomemos robar como ejemplo: estás robando
continuamente- atención, tiempo, amor, así como las ideas y propiedades de
otros. Robas su integridad y su buen nombre con tu cotilleo, tus condenas y tus
juicios. Hablas maliciosamente de sus faltas como si tu mismo fueras puro y
perfecto. Les denigras para elevarte a ti mismo e inflar tu propio ego.
Simplemente reconoce y aprópiate de lo que haces y de quién eres. Cuando estás
sólo y nadie puede verte, te muestras en tu forma más verdadera, te metes el
dedo en la nariz y te tiras pedos, y sin embargo actúas de forma tan adecuada y
santa cuando estás en frente de otros. Admite al menos para ti mismo que eres
un narcisista, un egomaníaco, un hipócrita. Deja de mentirte a ti mismo. Te veo. En vez de intentar tanto ser tan
bueno y puro, lo cual nunca serás, mírate a ti mismo, observa más atentamente
como eres. Quizás te puedas esconder de otros; no te puedes esconder de mi.
Estar presente y atento no significa
esconderte de ti mismo. , sino ver y admitir quien y que eres realmente. No se
necesitan años de meditación en una cueva o en un monasterio para hacer
eso. Pregúntate a ti mismo si no estás
siendo hipócrita cuando condenas a otros por ser reales y humanos. Te creé para
que pudieras amar y ser feliz, pero te peleas con tu propia felicidad al tratar
tan duramente de ser justo y bueno. Entonces me preguntas por qué sufres. Te
apegas a la palabra escrita como si vienera desde MI. Lo llamas el Buen Libro
de las Enseñanzas cuando todo el libro y el conocimiento está ya dentro de ti.
Ya te he dado todo lo que necesitas, ha estado contigo desde el nacimiento. Hay
un tesoro verdadero dentro de ti y sin embargo buscas en otros lugares la
verdad.
P: Dices que tengo un tesoro dentro de mi.
¿Cómo lo encuentro?
Dios: El mismo que lo busca lo es. Por ello
no puedes verlo. Es como buscar el Santo Grial ahí fuera como si fuera un cáliz
o alguna cosa material. La gente ha entendido eso mal por mucho tiempo. Tú eres
el Santo Grial, y por ello no importa donde busques, no puedes encontrarlo. El
Grial es tu misma vida en si misma. Siempre contiene la cantidad justa, ni
demasiado ni demasiado poco, y no hay mayor tesoro que esta cida que te he
dado. Ninguna otra cosa sería posible sin ELLA.
Tu propio Ser y Humanidad son dos de los
tres tesoros que te he dado. Juntos, ya que no pueden ser divididos o
separados, constituyen un tercer tesoro. Tu Ser es sin principio ni fin, sin
nacimiento y sin muerte, no nacido y no va a morir, y ni viene ni va. No tiene
ni demasiado ni demasiado poco de nada, no tiene fronteras ni limites, es
eterno y más allá del tiempo. No puede ser destruido o herido. Tu Humanidad te
da la capacidad de sentir, de llorar, de ser feliz o estar triste. Tienes la
capacidad de amar y de herir, de ser amables entre vosotros o ser crueles.
Puedes estar apegado y sufrir o desapegarte de tu noción del yo y ser liberado.
Tu capacidad de apegarte, incluso a no estar apegado, no tiene limites y tu
capacidad de hacer daño tampoco tiene limites. Te he dado todo lo que necesitas
para ser libre, alegre y feliz, y, lo más importante, para apreciar esta vida
que te he dado, para ser amable, amoroso, y considerado y actuar con sabiduría
y compasión hacia ti mismo y otros. Me preguntas qué puedes hacer. ¿ Por qué no
empiezas por ser un poco más amable y más amoroso hacia otros, tus vecinos,
amigos y familia?
Como ya LO eres, eres mi creación y me
manifiesto dentro de ti. De hecho me manifiesto como tú y a través de ti. No
estoy separado de ti. Si simplemente te quedarás quieto y pidieras hablar
conmigo, simplemente dame una oportunidad de ser escuchado y hablaré a través
de ti. Cundo realmente te vuelves muy intimo con no saber, con simplemente ser
en vez de hacer, vendré a través de ti con un silencio muy alto y claro. Cuando
estás ocupado y haciendo ruido no puedes oírme, pero nunca estoy muy lejos. De
hecho siempre estoy justo aquí y ahora. Simplemente confía en que estoy
funcionando perfectamente a través de ti cuando eres consciente y estás
presente. Cuando eres auto-consciente no puede sentírseme porque tu yo se
interpone. Eres el Camino pero actúas como si debieras encontrar el Camino o
volverte el Camino. Simplemente suelta y renuncia a tu yo. Si encuentras
demasiado difícil soltar entonces
simplemente deja ser, eso es suficiente. Deja que otros sean, déjate a ti mismo
ser, y ¡por el amor de Dios!, déjame a MI también.
P: ¡Suena como si no tuvieras mucho corazón!
Dios: ¿Qué quieres? Os envié a mi hijo el
cual era una hermosa expresión del amor, y a su madre, que estaba llena de
compasión. Dejo el corazón y la suavidad a su madre. Yo soy tu padre, no tu
madre, ni su madre tampoco de hecho. Siempre me preguntas como pude hacer esto
o aquello, hacer guerras, arrebatarte a los seres queridos, etc., pero yo no
hago la guerra, vosotros la hacéis. Yo creo la vida; vosotros hacéis la guerra
y el conflicto, no yo. Simplemente os di una oportunidad de hacer el bien o el
mal, el reston depende de vosotros. ¿Qué quieres de mi?
P: ¿Qué es lo que tu quieres de nosotros?
Dios: Yo no quiero nada de vosotros, sois
vosotros los que siempre estáis pidiéndome cosas. Me rezáis por esto y aquello
pero no me agradecéis lo suficiente lo que ya os he dado. Lo tenéis todo: pero
raramente os oigo estar agradecidos por lo que ya os he ofrecido. Os ofreceré
estás palabras en el cumpleaños de mi hijo [está es la expansión de un texto
que fue escrito por Genpo Roshi justo antes de la estación navideña]. Tengo
mucho más que decir pero pararé aquí de momento.
Traducido por Alejandro Villar
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.